Hikvision, el proveedor líder mundial de soluciones globales de seguridad, lanza la nueva generación de placas de calle IP, ofreciendo una sencilla solución de videoportero para residencias y pequeños edificios, que aporta múltiples ventajas, seguridad, y estilo en la puerta de entrada.
Estos dispositivos han sido especialmente diseñados para garantizar una instalación fácil y rentable, al contar entre otras funcionalidades con estándar PoE, sistema Plug and Play y tecnología Wi-Fi, ofreciendo además una rápida transmisión de datos. Ya sea a través del intuitivo asistente de configuración paso a paso desde el propio monitor o vía configuración web, el proceso de configuración resulta tremendamente sencillo y conveniente.
Los nuevos modelos incluyen la serie DS-KV61X13, y la serie DS-KV8X13. Esta última cuenta además con las opciones de montaje en superficie o empotrado, aportando una mayor flexibilidad. Se trata de unos equipos robustos, resistentes al agua, que cuentan con un nivel de protección IP65 e IK08.
El sistema de videoportero de Hikvision ofrece un excelente rendimiento gracias a la cámara IP Fisheye de 2MP que soporta WDR e imágenes en HD, proporcionando a los usuarios una perfecta visión de la puerta de entrada incluso en condiciones de poca luz. Otras características, como la protección anti-sabotaje, la opción Wi-Fi 2.4 GHz, las funciones en cuanto a control de acceso, o la posibilidad de control de toda la solución en remoto a través de la versátil aplicación Hik-Connect, hacen de esta línea de productos la solución idónea para entornos residenciales, tiendas, oficinas y pequeños edificios.