Los minoristas normalmente desean saber en qué productos están más interesados los clientes y qué productos promocionales les atraen a la tienda.
Gracias a la tecnología de mapeo por calor, los minoristas ven un mapa con código de colores de la cantidad de tiempo que pasan los compradores en áreas de tiendas específicas. Esto revela tanto los puntos calientes como las zonas muertas, así como cuántas personas compran realmente un producto específico, frente a aquellas que simplemente deciden recogerlo mientras pasan por al lado de forma informal.
Al distribuir estos datos a lo largo del tiempo, los minoristas pueden obtener información sobre cómo colocar mejor los artículos en la tienda y cómo diseñar mejor el diseño general de la tienda.