“La calidad de vida en muchas ciudades de todo el mundo se ve afectada por la intensidad del tráfico, tanto en lo que se refiere a movilidad ciudadana como a problemas de contaminación del aire. Para ayudar a combatir estos problemas, muchas ciudades están recurriendo a tecnologías de vídeo inteligente que ofrecen información en tiempo real para mejorar el flujo del tráfico y la seguridad en las vías urbanas.”
En todo el mundo, muchas rutas urbanas están ya saturadas. Esto provoca que los conductores sufran importantes retrasos, lo que aumenta la frustración de la gente y reduce la productividad. Esta situación también genera importantes riesgos para la salud debido a la mala calidad del aire. Por eso, el exceso de tráfico afecta negativamente a la calidad de vida de los habitantes de las ciudades y, en consecuencia, a la sostenibilidad de las ciudades.
Según un estudio de INRIX —empresa especializada en la gestión del tráfico—, los conductores de Los Ángeles pasaron más de 100 horas al año en atascos de tráfico en 2017, más que en cualquier otra ciudad del mundo. Por su parte, los atascos de tráfico de Londres cuestan a cada conductor, de media, el equivalente a 2.430 libras (2.700 euros) al año, lo que equivale a más de 9.500 millones de libras (10.700 millones de euros) en toda la ciudad en su conjunto.
Un importante dolor de cabeza para las autoridades municipales
No hace falta decir que el tráfico se convierte en un dolor de cabeza para los gestores de la ciudad, particularmente en ciudades donde el crecimiento urbanístico y económico ha provocado un aumento importante en el número de vehículos.
Para encontrar soluciones a largo plazo, las autoridades están investigando las causas fundamentales de la congestión del tráfico. En Hong Kong, el Comité Asesor de Transporte de la ciudad publicó un informe que identifica las tres causas principales del exceso de tráfico: 1) demasiados vehículos en las carreteras, 2) estacionamiento ilegal y 3) demasiadas obras en la carretera. Estos tres factores contribuyen en gran medida a los atascos en las ciudades de todo el mundo.
El papel de la tecnología
En muchas ciudades, no es posible construir más calles y avenidas, porque no hay espacio disponible, por no interrumpir las actividades económicas o por limitaciones presupuestarias. En estas circunstancias, los responsables municipales están empezando a buscar tecnologías inteligentes para hacer que los trayectos sean más rápidos y seguros.
Entre las tecnologías disponibles para mejorar el tráfico, destaca sin duda el vídeo de última generación. En particular, las innovaciones en Inteligencia Artificial (IA) y el deep learning han transformado el vídeo tradicional, ya que aportan funcionalidades que alertan a los operadores sobre problemas de tráfico en tiempo real. Esto permite tomar medidas inmediatas para mantener los carriles despejados y mantener el tráfico fluido.
Tres soluciones con tecnología de vídeo inteligente para lograr ciudades fluidas
Las soluciones de vídeo de última generación ya están ayudando a reducir la congestión y logran importantes ahorros de tiempo para los conductores. Estos son algunos ejemplos:
1) Guía de tráfico
Este tipo de solución utiliza cámaras instaladas en las principales intersecciones para controlar e informar sobre la intensidad del tráfico en tiempo real. Funciona mediante la constante observación del tráfico en los carriles y el conteo de vehículos dentro de las áreas definidas de la carretera. Luego, los datos se envían a los centros de gestión del tráfico, donde los operadores pueden tomar las medidas adecuadas para acelerar el tráfico.
Esta solución también puede dar información del tráfico a los conductores a través de pantallas, para que puedan calcular su hora de llegada y, si los retrasos son importantes, para que elijan rutas alternativas.
2) Control de señales de tráfico
Las soluciones de control de señales de tráfico permiten coordinar los semáforos para que el tráfico fluya con la mayor agilidad posible. Utilizan datos de los sistemas de guía de tráfico para entender dónde se están produciendo atascos. Con esa información, coordinan los semáforos para nivelar el flujo de vehículos, lo que reduce la frustración de los conductores y elimina la necesidad de intervención personal por parte de la policía cuando el tráfico se acumula en una dirección.
3) Control del tráfico
En muchos casos, la congestión del tráfico se debe a maniobras ilegales o irresponsables en las carreteras, como aparcamientos indebidos o el uso de carriles para autobuses. Con las soluciones de vídeo de control del tráfico, se detectan automáticamente vehículos que circulan en sentido contrario, giros ilegales, aparcamientos indebidos... Esto permite a los operadores de los centros de control de tráfico alertar a las autoridades que pueden actuar en tiempo real para mejorar la seguridad pública y responsabilizar a los conductores.
Un futuro mejor para ciudades congestionadas
Ahora que la gestión del tráfico es una prioridad para la mayoría de las autoridades de la ciudad, la tecnología de vídeo inteligente supone un rayo de esperanza. Al controlar el tráfico en tiempo real, este tipo de soluciones permite tomar medidas inmediatas para reducir los embotellamientos. Con ello, baja la frustración de los conductores, se reduce la productividad perdida y mejora la calidad del aire. Además, la detección de incidentes en tiempo real ayuda a los conductores a conducir, lo que en última instancia reduce el número de accidentes y salva vidas.