Un almacén saturado, lleno de interminables hileras de estanterías y pilas de cajas, es ahora algo habitual, sobre todo durante las grandes promociones. Pero a medida que crece el mercado mundial del comercio electrónico, aumentan las exigencias para los almacenes. Por eso, cada vez más fabricantes y empresas de logística integran sus sistemas de gestión de almacenes (SGA) con sistemas de videovigilancia que les permiten seguir los paquetes individuales a lo largo de su trayecto hasta el cliente.
La tendencia de las compras en línea está en auge, y todo está al alcance de un clic, desde los artículos de primera necesidad hasta los de lujo. En 2023, el mercado mundial del comercio electrónico se valoró en USD 25.930 millones, y se espera que crezca rápidamente, con una CAGR del 18,9% de 2024 a 2030. Este auge significa que los almacenes tendrán que hacer frente a un enorme aumento del volumen de paquetes que deben manipular y entregar. Se trata de una excelente oportunidad para las empresas que prestan servicios de almacenamiento, logística y transporte.
La dificultad de los operadores en almacenes
Sin embargo, este crecimiento conlleva el reto cada vez mayor de rastrear y asegurar miles de paquetes cada día para garantizar que lleguen sin problemas a las puertas de los clientes. Es necesario hacer un seguimiento de todos y cada uno de los paquetes a lo largo de su recorrido por el almacén para evitar pérdidas o daños. Además, dado que ser capaz de hacer esto puede impactar en la experiencia del cliente, especialmente si algo va mal, muchos operadores de almacenes lo consideran ahora uno de sus principales retos.
La cuestión se vuelve especialmente crítica cuando desaparece un objeto. Si un cliente se queja, el almacén debe revisar la grabación de video del proceso de empaquetado para entender qué ha ocurrido y tomar las medidas oportunas para solucionar la falta del artículo.
En esas circunstancias, ha sido difícil encontrar pruebas en video de paquetes específicos que pasaban y salían del almacén porque los sistemas de gestión de almacenes (WMS, por sus siglas en inglés) suelen funcionar completamente separados de los sistemas de videovigilancia. Buscar manualmente en numerosos videos para localizar las órdenes en problemas es un proceso que requiere mucho tiempo y trabajo. Este proceso puede complicarse aún más si las grabaciones que existen del video que transmiten las cámaras no están claras. No es de extrañar que a muchos almacenes les resulte extremadamente difícil hacer un seguimiento visual de cada uno de los paquetes que manipulan.