2006 fue un año triste para la vida marina y, de hecho, para toda la vida animal del mundo. Fue a fines de este año cuando el delfín Baiji, nativo del río Yangtze en China, fue declarado funcionalmente extinto: la primera extinción de este tipo a nivel mundial en más de 50 años. También fue posiblemente el primer delfín en la historia que desapareció debido a la actividad humana.
A raíz de esta terrible atrocidad, solo podemos aprender de nuestros errores. Y, afortunadamente, eso es precisamente lo que está sucediendo en el Yangtze hoy, a través de esfuerzos de conservación dedicados para la marsopa sin aleta del Yangtze.
Más amenazado que el panda gigante
Conocida en China como "El ángel sonriente" por su adorable sonrisa permanente, la marsopa sin aleta del Yangtze es un primo cercano del Baiji, y el único mamífero acuático que queda en el río Yangtze. Lamentablemente, esta hermosa criatura parecida a un delfín ha sido identificada por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) como "En Peligro Crítico". Solo alrededor de 1,000 permanecían en el río Yangtze y los lagos adyacentes a partir de 2017.
Para ponerte en contexto, hay menos marsopas sin aletas en el Yangtze que pandas gigantes en la naturaleza.
El peligro de esta especie se debe en gran medida a los mismos problemas que extinguieron al Baiji. Principalmente, la sobrepesca está reduciendo drásticamente el suministro de alimentos de la marsopa, pero la contaminación también juega un papel, junto con las colisiones debido al aumento del tráfico de botes en el río.
Hikvision: tecnología potente para una conservación más inteligente
Para ayudar a hacer frente a la creciente amenaza para la población de marsopas, en mayo de 2019 se lanzó el Proyecto de conservación de marsopas sin aletas del Yangtze. Se trata de una colaboración entre el gobierno chino y una variedad de organizaciones, incluido el Fondo Mundial para la Naturaleza, el Fondo One Planet y nosotros en Hikvision.
Nuestra tecnología de vigilancia es una parte clave del trabajo de conservación y se están utilizando dos soluciones de Hikvision: la primera son nuestras cámaras submarinas. Estas cámaras anticorrosión de alta resolución permiten a los conservacionistas sumergirse virtualmente las 24 horas del día, los 7 días de la semana en el hábitat acuático de las marsopas, monitoreando el ambiente de cerca mientras recopilan datos valiosos sobre el comportamiento natural de los animales en la naturaleza.
El proyecto también utiliza nuestros vehículos aéreos no tripulados, junto con cámaras Hikvision de alta resolución, para patrullar el hábitat de manera eficiente desde arriba. La población de marsopas se encuentra dentro del canal principal del río Yangtze en el centro y este de China. Este tipo de tecnología de vanguardia es, por lo tanto, muy valioso para un monitoreo eficiente en un área tan amplia.
Conservación = colaboración
La protección de especies en peligro de extinción como la marsopa sin aleta del Yangtze debe ser un esfuerzo de colaboración. Los gobiernos, las empresas, las ONG y otras organizaciones sociales deben trabajar juntos para evitar la extinción de la preciosa fauna de nuestro planeta.
En los últimos años, Hikvision se ha involucrado cada vez más en iniciativas de desarrollo sostenible. Estamos orgullosos de que nuestra tecnología se esté utilizando para ayudar a monitorear y proteger una variedad de animales en peligro de extinción, incluidos pandas, tigres siberianos y gansos. Muchas de estas especies han estado en la tierra durante cientos de miles de años. A través de nuestros esfuerzos de colaboración, esperamos que permanezcan protegidos durante muchos, muchos más en el futuro.
Conoce más
Hikvision se compromete a explorar el poder de la tecnología para asegurar la sostenibilidad y la biodiversidad del mundo. Para obtener más información sobre nuestras soluciones de monitoreo remoto y el valor que pueden aportar a la conservación, visita aquí, o contáctanos en GLOBALPR@hikvision.com.
Puedes ver un video de nuestro trabajo de conservación para la marsopa sin aleta del Yangtze aquí.