La serie a prueba de explosiones y anticorrosión de Hikvision ofrece cámaras especiales para aplicaciones en entornos peligrosos y extremos.
Las cámaras a prueba de explosiones utilizan una carcasa de acero inoxidable de 3,5 mm de espesor y una junta especialmente diseñada para ayudar a prevenir explosiones internas. Con las cámaras a prueba de explosiones de Hikvision, el monitoreo se puede realizar de forma remota, lo que aumenta la seguridad y la protección sin requerir la presencia de personal en áreas peligrosas. Las cámaras a prueba de explosiones de Hikvision son ideales para aplicaciones como fábricas, plantas químicas, estaciones de petróleo y gas.
La sal, la humedad y la contaminación química pueden dañar significativamente los dispositivos electrónicos, especialmente con una exposición continua. Las cámaras anticorrosión de Hikvision, construidas con acero inoxidable de grado 316L (también conocido como grado marino), son lo suficientemente robustas para soportar la mayoría de los entornos corrosivos. El diseño resistente a la corrosión de las cámaras resiste el aire salado del mar, lo que las hace adecuadas para entornos químicos, marinos, navales, submarinos y otros entornos corrosivos.